
Ganas de sonreír me van llenando de pasión
y cada día que pasa, siento como la
locura toma casa en mí haciéndome vivir
y amar cada cosa que tengo y tendré.
Las palabras se adueñan de mi mente
y mi cálido corazón las dicta a sus dulces
mensajeras, mis manos blancas y pequeñas,
que a cada segundo escribe lo que dice el alma.
Anhelo escribir como ayer,
sentir nuevamente que tengo un algo especial,
sonrío otra vez y solo me dedico a disfrutar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario